SOBRE EL AUTOR.
Como ocurre frecuentemente con los escritores medievales, son muy escasos los datos que tenemos sobre Juan Ruiz. Además, casi todos ellos proceden del propio libro, con lo cual, es conveniente tomarlos con relativa prudencia.
Probablemente, nació en Alcalá de Henares hacia finales del siglo XIII. Debió de estudiar en Toledo y ocupó el cargo de arcipreste en Hita, en la actual provincia de Guadalajara.
También a partir de lo que se refiere en el libro, pueden concluirse algunos otros datos sobre el autor, como que pudo ser un clérigo culto con conocimientos de derecho, teología, astronomía y filosofía. Con todo, Juan Ruiz no parece que fuera un clérigo ortodoxo instalado cómodamente en la jerarquía eclesiástica, sino que, por lo que se apunta en su libro, bien pudo estar próximo a la órbita de los goliardos, clérigos vagabundos de vida irregular que escribían en latín sobre asuntos alegres y mundanos, como la vida en las tabernas, el juego, el amor y los placeres, y se burlaban y atacaban a las instituciones eclesiásticas.
Como ocurre frecuentemente con los escritores medievales, son muy escasos los datos que tenemos sobre Juan Ruiz. Además, casi todos ellos proceden del propio libro, con lo cual, es conveniente tomarlos con relativa prudencia.
Probablemente, nació en Alcalá de Henares hacia finales del siglo XIII. Debió de estudiar en Toledo y ocupó el cargo de arcipreste en Hita, en la actual provincia de Guadalajara.
También a partir de lo que se refiere en el libro, pueden concluirse algunos otros datos sobre el autor, como que pudo ser un clérigo culto con conocimientos de derecho, teología, astronomía y filosofía. Con todo, Juan Ruiz no parece que fuera un clérigo ortodoxo instalado cómodamente en la jerarquía eclesiástica, sino que, por lo que se apunta en su libro, bien pudo estar próximo a la órbita de los goliardos, clérigos vagabundos de vida irregular que escribían en latín sobre asuntos alegres y mundanos, como la vida en las tabernas, el juego, el amor y los placeres, y se burlaban y atacaban a las instituciones eclesiásticas.
La obra se enmarca en un periodo histórico, el siglo XIV español de
una marcada decadencia de las costumbres visible de forma especial en el ámbito
eclesiástico. Desde el punto de vista religioso es un tiempo, una época, de
contrastes, pues frente a esa decadencia de las costumbres que se manifiesta en
las prácticas corruptas de parte de la alta jerarquía eclesiástica y las
conductas escandalosas de muchos clérigos, están el fervor religioso, entre
otras manifestaciones de sincera religiosidad. Este contraste, este dualismo
vital, puede ser considerado como las señas de identidad del hombre medieval,
quien se debate entre su ferviente religiosidad y ansia de fe y las tentaciones
del mundo y sus placeres.
La obra del Arcipreste de Hita ha llegado hasta nosotros a través
de tres copias manuscritas, dos de finales del siglo XIV y una de principios
del XV. Se encuentran en la Real Academia Española, en la Biblioteca Nacional y
en la Biblioteca de la Universidad de Salamanca. Se trata de copias del
original escrito por Juan Ruiz en 1330 en una primera versión y completado en
1343 en su versión definitiva.
FRASES
Como también es relativamente frecuente en la literatura medieval
española, la obra del Arcipreste de Hita se difundió durante mucho tiempo sin
título alguno. Era conocida comúnmente como Libro
del Arcipreste de Hita. En 1898, el gran medievalista español Ramón
Menéndez Pidal bautizó el libro con el título con el que hoy lo conocemos. Lo
hizo a partir de unos versos de la propia obra:
Tú, Señor e Dios Mío, que el omne crieste,
enforma e ayuda a mí el tu arcipreste,
que pueda fazer un libro de buen amor
aqueste,
que los cuerpos alegre e a las almas
preste.
No hay comentarios:
Publicar un comentario